Para comenzar este 2010 nada mejor que una aventura, después celebrar el año nuevo entre amigos nos fuimos a dormir para la gran travesía a Isla Mamey. Nos levantamos a las 5 am un buen desayuno y listos para lanzarnos al agua apenas salía el sol y ya estábamos remando con dirección a nuestro destino nos inundaba una alegría y a la vez una adrenalina por las cosas que veríamos y pasarían durante este recorrido.
El kayak estaba listo para enfrentar cualquier adversidad nosotros igual, es aquí donde piensas en todo para evitar cualquier sorpresa. La costa del Océano Atlántico Panameño nos esperaba con unas fuertes olas y corrientes que harían retirar al más valiente pero la meta estaba trazada teníamos que cumplirla, comenzamos a bordear la costa en dirección a unos manglares para poder llegar a mar abierto y tomar rumbo a Isla Mamey aquí pudimos observar una diversidad de fauna y flora típica de la región, al salir de estas aguas calmadas comenzó la adrenalina al ver el oleaje tan grande que se nos venia encima, remamos duro y soportamos el viento hasta alcanzar aguas un poco más tranquilas, luego de 40 minutos luchando logramos ver a lo lejos la Isla pero no terminaba ahí la aventura para poder entrar a este bello paraíso tienes que sortear una serie de arrecifes que pueden hundir cualquier embarcación, con paciencia y mucha vista logramos llegar a tierra, en frente nuestro Isla Mamey nos recibió con mucha calma y una gran alegría de cumplir la meta trazada.
Cada persona tiene su Everest en mente hay que alcanzarlo..........................